El objetivo no es solo tratar la enfermedad, sino también cuidar la imagen corporal y el bienestar emocional de la paciente. Estas técnicas pueden realizarse en el mismo acto quirúrgico de la cirugía oncológica o en un momento posterior, según cada caso.
Entre las opciones disponibles se incluyen:
- Cirugía conservadora oncoplástica: remodelación de la mama al retirar el tumor, para mantener una forma estética.
- Reconstrucción con tejidos propios: uso de colgajos de la propia paciente (abdomen, espalda u otras zonas).
- Reconstrucción con implantes: utilización de prótesis mamarias para recuperar volumen y simetría.
En nuestra clínica, ofrecemos un enfoque integral que une la seguridad oncológica con la armonía estética, priorizando tanto la salud como la calidad de vida de cada paciente.
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