Por Dra. Karen Cruz – Cirujana oncóloga especializada en cáncer de mama, piel y tejidos blandos.
La prevención del cáncer de mama comienza con pequeños cambios que puedes integrar en tu vida cotidiana. La Dra. Karen Cruz comparte cinco acciones simples que fortalecen tu salud y ayudan a reducir el riesgo.
1. Mantén una alimentación equilibrada
Una dieta rica en frutas, verduras y granos integrales aporta antioxidantes que protegen las células. Evita el exceso de azúcares y grasas saturadas, y prefiere alimentos frescos y locales.
2. Practica actividad física regularmente
Al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana pueden disminuir el riesgo de cáncer de mama. Caminar, bailar o andar en bicicleta son excelentes opciones. La actividad física también mejora el estado de ánimo y controla el peso.
3. Modera el consumo de alcohol
El alcohol, incluso en cantidades pequeñas, puede aumentar el riesgo. La recomendación es limitar su ingesta o evitarlo por completo para una mejor salud mamaria.
4. Realiza autoexámenes mensuales
Conocer tu cuerpo es fundamental. Hazte un autoexamen de mamas una vez al mes, preferiblemente después del periodo menstrual, para detectar cualquier cambio. Si notas bultos, secreciones o alteraciones, consulta de inmediato.
5. Programa chequeos médicos anuales
Nada reemplaza a la revisión profesional. La mamografía preventiva a partir de los 40 años (o antes si hay antecedentes familiares) permite detectar el cáncer en etapas tempranas, cuando el tratamiento es más eficaz.
Un compromiso con tu salud
“La educación y la prevención salvan vidas. Dedicar unos minutos a cuidarte hoy puede marcar la diferencia mañana”.
Consejos rápidos
- Mantén un peso saludable acorde a tu edad y estatura.
- Duerme entre 7 y 8 horas diarias para fortalecer el sistema inmunológico.
- Practica técnicas de manejo del estrés, como meditación o yoga.
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